Hace ya tiempo que nos acostumbramos a escuchar en las noticias las acciones militares llevadas a cabo de forma remota por drones o aeronaves no tripuladas. Los famosos Predator americanos, llevan tiempo sobre-volando los países y zonas de guerra más convulsos del mundo y sus capacidades como herramienta de inteligencia, vigilancia y erradicación de objetivos los hacen una de las armas más letales del planeta. Armas que se controlan desde la comodidad del desierto de Nevada en Estados Unidos.

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Otra cosa ya es la transparencia y legitimidad sobre su uso, que en el caso del gobierno de los Estados Unidos, parece ser bastante escasa y muy poco o nada explicada. El programa de drones contra objetivos terroristas se desarrolló bajo el auspicio de la administración Bush y la llamada «guerra contra el terror«. Ya por aquél entonces, su uso por parte de la CIA contra objetivos talibanes y de Al-Qaeda, generaba un gran debate respecto a las posibles violaciones contra la soberanía nacional y los derechos humanos que éstos ataques con drones podían suponer.

Sin embargo, fue durante la administración de Barak Obama, cuando el número de ataques creció significativamente, sobretodo en Pakistán y Yemen. Según Obama estos ataques han sido dirigidos exclusivamente contra objetivos terroristas, causando contadas víctimas civiles por daños colaterales. Pero según otras informaciones, lo que se pretende precisamente es ocultar la realidad, con cifras que apuntan hasta un total de 200 víctimas entre enero de 2012 y febrero de 2013, de las cuáles sólo 35 eran objetivos verdaderos.

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Una de las mayores polémicas es sobre la normalización que se ha impuesto en el uso de los drones para eliminar objetivos, cerrando las puertas a las detención y puesta a disposición judicial de esos mismos «objetivos» terroristas, procedimientos como mínimo controvertidos en países supuestamente democráticos. También parece haber pruebas que demuestran el asesinato de civiles americanos con drones, algo que va en contra de la constitución de los Estados Unidos.

Parece que la transparencia del gobierno americano sobre su programa de drones deja mucho que desear y son muchas las incógnitas sobre su verdadero uso así como sobre los balances de víctimas que esta guerra del terror deja en países a cuyas fronteras llegan silenciosamente los drones americanos.

En el siguiente vídeo apuntan a la existencia de unos papeles secretos sobre el uso de los drones que podrían dejarnos helados…

Foto Portada: pakistantoday