El Burning Man es un festival de música que se celebra en medio del desierto en Nevada, Estados Unidos. Lo que ocurre con la cámara de este dron es espectacular. Tras caerse en pleno vuelo sobre una multitud de gente desde una buena altura y no hacer daño a nadie, la gopro es rescatada por un participante del festival que se va con ella a uno de los epicentros de la fiesta en el momento.

Por suerte para su dueño, además de no haber hecho daño a nadie, pudo encontrar la cámara en objetos perdidos y además con todo el contenido en su tarjeta.